¿Qué diferencia hay entre un anteproyecto, proyecto básico y de ejecución?

Diferencia entre anteproyecto, proyecto básico y ejecución

Si algo ha dejado claro la pandemia es que ya no estamos dispuestos a conformarnos con pisos de unos pocos metros cuadrados. El confinamiento puso de relieve que, entre otras estancias, es necesaria una zona verde, como un jardín o una terraza, donde poder hacer ejercicio sin molestar al resto de integrantes del hogar o ser objeto de miradas por parte de los vecinos del bloque de enfrente.

De igual modo, las prisas por construir casas unifamiliares o chalets provocan en muchos casos que los clientes estén dispuestos a ignorar alguno de los tres pilares básicos en lo que a la construcción de una casa se refiere: el anteproyecto, el proyecto básico y el proyecto de ejecución.

Si desconoces las principales diferencias existentes entre todos ellos, los Colegios de Arquitectura te pueden ayudar a solventar este tipo de dudas. O, si no, recuerda que siempre tienes a tu disposición un arquitecto en Vitoriapor ejemplo. No obstante, a continuación te informamos de lo que tienes que saber al respecto:

¿Qué es un anteproyecto?

Como bien aclara el Real Decreto 2512/1977, de 17 de junio, el anteproyecto no es otra cosa que la parte del trabajo en la cual se especifican los datos generales de la obra, con el fin de llegar a una primera configuración de lo que esta será en el futuro. De igual manera, la exposición de los aspectos fundamentales de sus distintas particularidades ayudan a fijar una primera estimación económica. Por lo tanto, estamos hablando de características constructivas, como es lógico, pero también funcionales, formales y, por último, presupuestales.

Si bien todas son importantes y requieren de tiempo para fijarse en el documento de manera objetiva, no cabe duda de que el coste es lo que más continúa interesando a los clientes. Sin embargo, este podrá aumentar o descender a medida que avance el resto de los proyectos, por lo que la cifra del anteproyecto no es ni mucho menos inamovible.

¿Qué es un proyecto básico?

Por otra parte, el proyecto básico es aquel que se entrega en forma de planos y memorias al ayuntamiento de la localidad donde se quiere iniciar la obra. Su finalidad es demostrar a las autoridades responsables de la aprobación que los escritos respetan las normativas municipales, las normativas de construcción y la legalidad en general. Asimismo, es necesario cumplir el CTE DB SI, comúnmente conocido como “Seguridad en caso de incendio”.

Dentro de la citada memoria, debe incluirse una definición general de la edificación, que irá acompañada a su vez de planos de planta, alzados y secciones a escala para un mejor entendimiento. También es imprescindible hacer un resumen global del coste de cada capítulo, oficio o tecnología que se quiera emplear, si bien no es necesario ser tajantes en este sentido, pues, como hemos aclarado anteriormente, puede variar con el tiempo.

¿Qué es un proyecto de ejecución?

Por último, pero no menos importante, el proyecto de ejecución viene a complementar aquella información que no se aporta en el segundo de los proyectos que hemos explicado, el básico. Nos referimos a las medidas de las instalaciones, el cálculo de las estructuras y un pliego que acredite que se respetan las normativas en materia de ruido y aislamiento térmico, por ejemplo. 

Concretamente, este documento final consta de una memoria de cimentación, estructura y oficios, así como de sus respectivos planos, detalles constructivos, y esquema y dimensionado de las instalaciones. Además, en este apartado, el presupuesto tiene que fijarse de manera realista y atendiendo a los precios del mercado.

Aunque la licencia de obra se solicita junto con el proyecto básico, la construcción no puede comenzar hasta que este último reciba la luz verde y, por consiguiente, se puede hacer entrega del proyecto de ejecución. A partir de ese momento, la licencia es expedida y los obreros tienen vía libre para ponerse a trabajar.

Cabe destacar que cada arquitecto es libre de decidir redactar primero el proyecto básico y, acto seguido, el de ejecución; o, por el contrario, preparar ambos en conjunto. Normalmente, el criterio viene marcado por la ostentosidad de la construcción. Es decir, cuanto más pequeña es la obra, más posibilidades tiene de que la licencia sea concedida en un menor tiempo.

 

Como ves, cada proyecto que hemos mencionado es importante. Desde el anteproyecto, para ayudar a idear una imagen global de la obra, hasta el proyecto de ejecución, para determinar de una vez por todas las características de la misma. Y pasando, cómo no, por el proyecto básico, que trae consigo la petición de la ansiada licencia, sin la que no se podrían poner los primeros cimientos. Por suerte, un estudio de arquitectura y el resto de arquitectos están sumamente preparados para responder a todas las cuestiones que te hayan podido surgir, así como realizar todos los documentos necesarios para ver tu casa unifamiliar hecha realidad.